La 4-T y el uso electoral del presupuesto

El presidente Andrés Manuel López Obrador puso el dedo en la llaga al señalar que la oposición rechaza la iniciativa de que el Ejecutivo ejerza a su antojo el presupuesto anual 2020, porque ya vienen elecciones.

Por supuesto que el inquilino de Palacio Nacional tiene toda la razón: los partidos opositores se niegan a que un solo hombre decida la distribución de las millonarias partidas presupuestales, porque pueden usarse electoralmente.

Nadie había tocado el tema tan abiertamente como lo hizo ayer el Presidente, que, inconscientemente, reveló que su administración quiere dejar fuera las reglas del Congreso, para disponer arbitrariamente del dinero… precisamente en año preelectoral.

Los diputados y senadores propondrán mañana en la Comisión Permanente la realización de un periodo extraordinario la próxima semana, a fin de otorgarle al tabasqueño poderes supremos de decisión sobre el uso de los recursos públicos.

¿Qué significa esto?

Pues que desde Palacio Nacional se podrán reorientar los recursos; destinarlos a las áreas que decida el Presidente, sin tener que pedirle permiso a nadie, con el pretexto de combatir la pandemia del COVID-19.

Y conociendo cómo operan los morenos, esa decisión será música para sus oídos porque se enfocarán a dar dinero a los más pobres… claro, de acuerdo con los padrones de beneficiarios que ellos mismos levantaron y que seguramente intentarán hacer crecer.

Por eso al gobierno no le interesa que los empresarios hayan conseguido por su cuenta apoyo de créditos a través del Banco Interamericano de Desarrollo para que las empresas mexicanas puedan subsistir; le interesa ser el principal benefactor de los pobres.

Pero da la casualidad que si las empresas no tienen dinero para generar empleos y riqueza, el gobierno no tendrá recaudación y no habrá más recursos para regalar a la cada vez mayor cantidad de pobres.

El tabasqueño justifica su intención de ejercer los recursos con discrecionalidad, pues asegura que así se ha hecho siempre. Que antes los diputados aprobaban un presupuesto y el Ejecutivo gastaba más transfiriendo recursos de una partida a otra.

Y a lo mejor sí es cierto, ¿pero no que la 4-T no era igual a los de antes?

Quizá por ello varias alcaldías morenas de la Ciudad de México ya están anunciando que en esta pandemia repartirán dinero en efectivo y vales para Diconsa a la población vulnerable, a quien le dirán de parte de quién les llega esa lanita.

¿No es electoral ese manejo de recursos?

Sí, el Presidente y la oposición tienen razón en pensar que el presupuesto se usará electoralmente.

 CENTAVITOS

El que no deja de cantinflear con el tema de los tapabocas es Hugo López-Gatell, quien uno día dice que no sirven, otro que sí y otro más que quién sabe, pero el hecho es que en la Ciudad de México Claudia Sheinbaum ya los hizo obligatorios para todos… bueno, casi para todos, porque ni el Presidente, ni la propia jefa de Gobierno los usan. Ayer mismo Claudia encabezó una reunión en el C-5, donde instaló un puesto de mando para el tema del COVID-19, y fue la única en la mesa que no portó cubrebocas. Por su parte, López Obrador dijo que él no lo usa porque no se lo ha recomendado López-Gatell, quien, por cierto, tampoco lo usa. ¿O sea..?, como que habría que predicar con el ejemplo, ¿no?