Isabel Dorado Auz
Esta frase, atribuida al político colombiano Carlos Gaviria Díaz, tuvo una gran presencia en redes sociales como advertencia ante las elecciones que llevó a cabo Morena para integrar el Consejo General de Delegados que participará en el Congreso Nacional de ese partido.
En la mañanera de este lunes uno de agosto, el presidente de la República se dijo satisfecho con los resultados, dado que participaron dos y medio millones de personas. Resaltó el hecho de que Rafael Barajas, El Fisgón, haya sido uno de los electos, para contrarrestar la crítica de lo que el presidente llama conservadores, quienes señalan que hubo una serie de irregularidades. Respecto a este punto, Pedro Miguel diría; “Una conclusión parcial es que si tanto @fisgonmonero como yo fuimos los más votados en nuestros distritos, es porque allí las infiltraciones masivas del PRIAN y de grupos de interés no funcionaron como algunos temían. A menos, claro, que ambos seamos infiltrados prianistas”.
Obviamente, difiero del optimismo del presidente pero en algo tiene razón, solo el Pueblo puede salvar al Pueblo. Por lo mismo, es posible que Andrés Manuel logre ver la realidad cuando el Pueblo decida realmente organizarse y no solo participar en procesos electorales.
Damián Alcázar, reconocido actor, dijo que “el voto de expriistas, expanistas y experredistas ayudó mucho para que en 2018 AMLO ganara la presidencia, pero, eso de que los nuevos quieran mandar en morena ya es otra cosa que los verdaderos #Obradoristas no deben permitir”. Lo que se vio en Sonora, pareciera que no concuerda con lo que deseaba el actor.
La falla, creo Yo, es que se está implementado la misma práctica que llevó al PRD a alejarse de la gente verdaderamente de izquierda y que hoy lo tiene aliado con los prianistas, la afiliación masiva en las elecciones internas abierta a la población. Esto es, había libertad total para que cualquier persona pudiera votar con la única “obligación” de afiliarse al partido. Esta práctica generó en el PRD una serie de vicios y lo más común fue el acarreo y la compra de votos, situación que se está denunciando en el proceso actual de Morena. Un joven muy honesto a quien verdaderamente admiro posteó lo siguiente; “lamentablemente ganó la corrupción en la elección pues muchas irregularidades se presentaron durante la jornada. No es nada nuevo, nunca se corrigieron estas actitudes ni malas prácticas. El partido seguirá gobernado por los mismos que permitieron estas prácticas en el pasado, y por otros deshonestos que ahora serán parte del clan”. Me hizo recordar a los Chuchos del PRD.
La otra realidad, es que Morena ha sido recolector de personajes muy cuestionados que provienen de las filas prianrredistas y sería un desastre que se frenara ese gran empuje democrático que iniciara con gran fuerza en 1988 y que se esperaba que Morena y la 4T serían los garantes de una verdadera transición a la democracia.
Estemos atentos, no debemos claudicar y seguir luchando desde nuestras trincheras y no necesariamente ocupamos afiliarnos a Morena. Hacer coincidir el discurso del presidente con la realidad debe ser nuestra encomienda si realmente queremos combatir la desigualdad social.
