
Los soldados rociaron de gasolina a Rodrigo Rojas, de 19 años, y Carmen Quintana, de 18, y les encendieron fuego durante la manifestación callejera el 2 de julio de 1986.
Chile.- El ejército en manos de Augusto Pinochet no solo desaparició a miles de hombres y mujeres sino que también reprimió a manifestantes prendiéndoles fuego.
Por ello, un juez ordenó el arresto de siete militares por las quemaduras que provocaron la muerte de un joven chileno-estadounidense y dejaron secuelas a una joven desde 1986.
Dos oficiales del ejército y cinco ex suboficiales fueron detenidos el martes por la noche después que el juez Mario Carroza emitió la orden.
Los soldados rociaron de gasolina a Rodrigo Rojas, de 19 años, y Carmen Quintana, de 18, y les encendieron fuego durante la manifestación callejera el 2 de julio de 1986. Rojas murió cuatro días después. Había nacido en Chile y estaba de visita de Estados Unidos, donde residía con su madre en exilio político. Quintana sobrevivió y se sometió a un larguísimo tratamiento de recuperación por quemaduras graves en un hospital canadiense.
El gobierno chileno calcula que 3,095 personas murieron durante la dictadura del general Augusto Pinochet de 1973 a 1990.
sdpnoticias.com


































