Rastrillando 24/06/2024
Mario Munguía Murillo
Lo que sea que signifique eso que llaman “inflación”; solo los economistas dicen saber su significado.
“La inflación en México llegó a 4.78% a tasa anual en la primera mitad de junio, tasa superior al 4.59% observado en la segunda quincena de mayo, impulsada principalmente por el alza de frutas y verduras, revelan los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi)”.
Esta es información oficial.
El ciudadano común, esos que llama pueblo el Ayatola cada mañana, no conocemos de Tecnicismos, ni neoliberalismo –ellos tampoco— ni nada que en sus retoricas mañaneras dicen los responsables de las finanzas públicas.
Lo cierto, lo cierto es que cuando la señora del hogar, la que si sabe administrar el raquítico salario que aporta el marido, va al supermercado; primero tiene que realizar un recorrido por el lugar y, así poder conocer los precios del día. Compara precios y, se da cuenta que han aumentado.
Ella no sabe de inflación; ella solo sabe que no le alcanza para cubrir la canasta básica, lo elemental para darle de comer a la familia.
El Ayatola asegura que el peso es la moneda más sólida del mundo y, sus feligreses fundamentalistas repiten como chachalacas “si amado pastor, fuera los oligarcas, el neoliberalismo” y una sarta de expresiones sin sentido.
Mientras, los oligarcas se reúnen con la candidata electa; y el más rico de México se sienta en la mesa del señor a comer ricas viadas y suculentos platillos, diría Feliciano Guirado (DP) el otrora mafioso de cuello blanco –López dixit— Carlos Slim hoy su amigo.
Así como un día lo hizo con Carlos Salinas de Gortari, cuando este, Salinas le entrego TELMEX a Slim; hoy, López prácticamente le está entregando PEMEX. Está documentado.
Pero bueno, recuerdo aquellos días en que los que hoy gobiernan, mentaban madres en contra de la privatización, contra Salinas y Carlos Slim.
Lo bueno es que “no somos iguales” López dixit.
Mientras, el Grama, perdón, la Jornada, publica una serie de fotos de Claudio X Gonzales padre, cabizbajo, meditabundo esperando ser recibido por la electa presidenta de toooodos los mexicanos/mejicanos.
No lo recibió, lo relego, lo ignoro, lo humillo. Esto, lo único que refleja es que “los adversarios” así serán tratados, con el látigo del desprecio. Lo mismo ocurre con los periodistas.
Es una forma de represión del poder contra todos aquellos que no se hinquen ante el Señor.
Esto es la continuidad de eso que han dado en llamar 4t.
Pero mejor a’i se las dejo… el legado de Mussolini renace…¡¡¡SARAVAH!!!
